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- El Origen de los Enanos y los Orcos
Posted by : LeonDelgado
viernes, 25 de octubre de 2013
Fue así que
Shinma estuvo de nuevo en la tarea de crear una raza nueva y fuerte. Sin
embargo no sabia bien como proceder, ya que aunque Shinma esta a cargo del
fuego de la vida, y en ella esta el poder de dar vida a lo que no existe, ella
deseaba crear algo bello y digno de los dioses. Fue así que busco a su hermano
Dagda, el dios del fuego y la orfebrería, creador de los más hermosos
artefactos y joyas jamás vistas por ser humano.
Shinma encontró a su hermano en su taller, justo cuando este había
terminado de forjar un hermoso martillo de hierro meteorito. Cuando Dagda supo
la tarea que Ashura había pedido a Shinma este se sintió orgulloso que su
hermana hubiera pedido su consejo.
Fue así que
Dagda le dijo a Shinma que el crearía el cuerpo de la nueva raza para que la
diosa le diera vid, pero que necesitaría de siete días y siete noches para
hacer esto. Y así quedo pactado, Shinma se marcho para regresar en siete días y
Dagda empezó a buscar la forma de la nueva raza.
Al principio
Dagda no lograba encontrar el material correcto en el cual esculpir a sus
hijos, y probó con todos los materiales de su taller, fuego, agua y roca, nada
servia. Hasta que el quinto día entendió que debía de forjar esta raza tan
fuerte como el hierro y tan resistentes como la piedra. Fue así que marcho a su
yunque y rompió el martillo que había estado forjando y de el obtuvo nueve
fragmentos. Con el primero creo una figura baja pero resistente, fuerte y
flexible como el hierro de la mejor arma. Así Dagda creo a Moradin, corazón de
hierro, y pronto creo cuatro figuras más formando así a los cinco patriarcas
Enanos.
Dagda estaba
feliz y orgulloso de su creación y cuando Shinma regreso este le mostró las
figuras que había esculpido y el corazón de la diosa se lleno de felicidad y
amor por los hijos de su hermano. Sin decir más la diosa de la vida vertió el
fuego de la conciencia en los cuerpos de hierro y piedra de los cinco
patriarcas y estos cobraron vida.
Dicen los
libros antiguos que los cinco patriarcas no eran Enanos ordinarios, sino que el
fuego divino estaba imbuido en ellos, durante muchos años vivieron con Dagda y
aprendieron los oficios de cómo transformar la piedra y el metal. Y pronto
fueron tan sabios en el uso de las herramientas como su padre Dagda.
Y Shinma y
Dagda les otorgaron un don para que los patriarcas pudieran tener hijos a los
cuales enseñar las artes que habían aprendido. Siendo así que los patriarcas
fueron dotados de la habilidad de verter su sangre en cualquier piedra o metal
del cual brotaban Enanos los cuales estaban listos para aprender las lecciones
de sus padres. Estos Enanos eran como los Enanos que encontramos hoy día en
Arcadia, solo que muchos vivieron por muchos más años que los enanos de hoy.
Los patriarcas tuvieron hijos e hijas los cuales se casaron y tuvieron
descendientes quienes prolongaron la línea de sangre de sus padres.
Dagda estaba
contento con sus hijos, y los presento a sus hermanos y a su padre Ra, quien
estuvo orgulloso de la creación de su hijo y de Shinma, fue así que Ra y Seti
dieron su aprobación a los Enanos. Pronto los hijos de los patriarcas
construyeron enormes templos y ciudades como así lo había deseado Ashura, quien felicito también a Shinma por
haber cumplido con sus Designios. Fue así que los Enanos fueron creados en
Arcadia, y así nacieron como una obra de Dagda y el fuego de la vida de Shinma.
Al pasar los
siglos, Dagda vio que el pueblo de los Enanos se multiplicaba y formaba clanes,
para que sus hijos fueran guiados con sabiduría decreto que el más anciano y
sabio de cada clan debía de ser el supremo regente, y designo a Mordin como el
supremo señor de todos los clanes, titulo que quedo simbolizado al entregarle
el hacha de los Señores Enanos, una espléndida arma que forjo exclusivamente
para él. Todos los jefes de clan vieron
la sabiduría de la elección de Dagda, excepto el más joven de los cuatro
hermanos de Mordin, Zert ojo de piedra.
El hermano
menor de Mordin codiciaba en secreto ser el supremo señor de los Enanos, y
envidiaba el hacha que poseía su Hermano mayor. Fue así que trato de convencer
a sus hermanos mayores que intercedieran a su favor ante Dagda, pero sus
hermanos aunque querían con todo su corazón a Zert amaban por igual a Mordin y
no habían visto que este no fuera digno del mando de los clanes, sino que todo
lo contrario. Así el hermano menor vio que no encontraría ayuda en sus hermanos
y marcho directamente con su padre.
El menor de
los cinco hermanos patriarcas encontró a su Dios en su forja, creando un arma
excepcional para el dios de la guerra, Ahriman. Dagda paro su labor y atendió
la inquietud de su hijo, este le explico que por que no lo eligió para ser el
supremo rey de los Enanos, y Dagda le respondió que el más apto para el cargo
fue Mordin. Al marcharse de la forja sin lograr nada Zert estaba triste y con
una carga pesada en su corazón, y en la salida se encontró con Ahriman, este
que era un dios malvado podo reconocer el sentimiento que creció en el corazón
de Zert: la envidia. Así Ahriman exhorto al menor de los patriarcas a que
tomara por la fuerza o la astucia el hacha de Mordin y clamara por ende ser el
legítimo rey de los Enanos.
Así Zert
quedo marcado por las mentiras y palabras del dios de la guerra, marcho a donde
se encontraba su hermano mayor. Llego a la montaña donde el clan de Mordin habitaba
y pido hospedaje, el cual le fue dado sin preguntar por ser uno de patriarcas.
Y Zert espero a la noche, marcho en sigilo a los aposentos de su hermano y
trato de robar su hacha, el símbolo de su puesto. Sin embargo, Hastrim, el hijo
de Mordin y defensor de la montaña, había estado vigilando los actos del
hermano de su padre, por que vio en sus ojos un fuego frió que le genero
desconfianza. Y fue así que Hastrim vio al patriarca tratando de robar lo que
por derecho era de su padre, y se interpuso entre Zert y el hacha de los
señores Enanos al mismo tiempo que clamaba la alarma.
Al oír el
grito de su hijo Mordin despertó y vio la vileza de su hermano, Zert furioso y
dolido por que su sobrino se interpuso se lleno de rencor hacia el y de un
golpe de su hacha lo partió en dos. Mordin estallo en ira y dolor, pero no
olvido nunca las leyes que rigen a su pueblo y no ataco a su hermano de forma
inmediata, en cambio lo reto a duelo por sus crímenes. Zert al ver el
comportamiento de su hermano vio por fin la mentira que Ahriman tejió en sus
ojos y se dio cuenta cual bajo había caído, sin decir palabras huyo de la
fortaleza de Mordin y desapareció en la noche, mientras Mordin lloraba en sus
salones de piedra por la muerte de su primogénito.
Zert huyo
hacia sus salones de piedra, pero antes de llegar se detuvo y maldijo sus actos
y estaba preparado para afrontar su castigo cuando una voz llego del viento y
le insito a seguir adelante, no era su culpa que su sobrino fuera un
entrometido y Mordin no podía negarle su derecho por el hacha, ya había llegado
muy lejos y no podía detenerse en ese momento. Y fue así que Zert enloqueció
del dolor y siguió el consejo del viento y marcho a sus salones a reunir sus ejércitos,
mientras en su trono Ahriman reía por su
triunfo en destruir la paz entre los pueblos Enanos, por que el secreto
de Ahriman era este: el odiaba a los Enanos por ser una obra perfecta de su
hermano y que este los prefirió a el, ya que el martillo donde procedieron los
Enanos era un arma que Dagda iba a regalarle a Ahriman.
Zert llego a
su fortaleza y llamo a su pueblo, les mintió diciéndoles que su hermano Mordin trato
de matarle por una riña, y su pueblo no pregunto ni cuestiono a su patriarca y
empezó a forjar armas y armaduras. Y en menos de dos días marcharon a la guerra
como un ejército que podía verse a legua de lo enorme que era. Fue así que los
hijos de Mordin vieron que sus hermanos venia dispuestos a la guerra y se
prepararon también, pero Mordin les dijo que no marcharan a la guerra. Y así Mordin
marcho solo a enfrentar el ejercito de su hermano, por que el dijo que no se
derramaría mas sangre Enana.
Zert vio
sorprendido que su hermano marcho solo a su encuentro y exhorto a su ejercito
que le atacara, acto que no hicieron sus hijos, ya que Mordin marchaba solo y
pidió hablar. El Patriarca menor sintió como el miedo invadió su corazón cuando
Mordin con voz de trueno dijo a todos los que pudieran oírle, y lo oyeron todos
a leguas a la redonda pues su voz era como un trueno, así Mordin relato los
crímenes que había cometido su hermano menor en su morada, y una vez más lo
reto a duelo para que pudiera recuperar su honor en batalla. Al oír esto Zert
se lleno de miedo, conocía la fuerza de su hermano y la temía, por lo que huyo
del campo de batalla. Al ver esto los hijos de Zert se sintieron avergonzados
ya que la mancha de su padre callo sobre ellos, así que soltaron sus armas y se
arrodillaron frente a Mordin y dejaron sus vidas en sus manos, este los
perdono, pero desde entonces fueron llamados los Daegars, los sin padre o los
sin clan, estos enanos renunciaron a cualquier vinculo con su patriarca y avergonzados
crearon sus fortalezas en las zonas mas profundas del mundo, avergonzados de su
pasado. Muchos de los Daegars que se ven hoy en día, viven como mercenarios o comerciantes
que viajan por Arcadia.
Sin embargo
ese no fue el final de Zert, pues Mordin llamo a los Patriarcas y a Dagda,
expuso los crímenes de su hermano y todos acordaron que lo mejor era esperar a
que el se entregara, pero desde entonces le dieron el nombre de Kroni, el sin
honor.
A pesar de
todo, uno de los Patriarcas, aun pensaba que Kroni podía enmendar sus agravo y
lo busco, este estaba en una caverna abandonada y recibió de mala gana la
visita de su hermano, este le dijo que se arrepintiera y volviera con el, y Kroni así lo deseo por un instante, pero la voz en el viento le advirtió que eso
era una trampa, que su hermano lo mataría y robaría su poder-“Roba su poder
antes que el robe el tuyo”- le dijo la voz y Kroni enloqueció del todo y ataco
con las manos a su hermano y le mato, sin posibilidad de volver atrás Kroni cometió un acto infernal: se comió el corazón de su hermano.
Cuando Kroni recupero algo de su cordura vio que era más fuerte que antes y algo distinto
físicamente, fue así que Ahriman se le apareció y reconoció que era la voz en
el viento, y le dijo a Kroni que podía derrotar a Mordin y reclamar el poder
sobre todos los Enanos solo si robaba la llama sagrada que todos los patriarcas
tenían en su interior, ya que cuando Dagda los forjo este puso un poco de el en
su creación, de esta forma Kroni seria un Dios. Fue así que el patriarca loco se
dio cuenta de que si devoraba los corazones de sus hermanos podría obtener el
poder para matar a Mordin.
Kroni busco uno a uno a sus hermanos y les dio
muerte para así devorarlos, junto con cualquiera que se interpusiera en su
camino. Pronto solo Mordin quedo con vida y cuando este se entero del destino
de sus hermanos lloro por todos, incluso por Zert. Así Mordin se vistió de
acero Enano y marcho en busca de su hermano enloquecido y lo encontró en un
trono hecho con los huesos de sus hermanos y lo reto por tercera vez a un
duelo. Pero esta vez Kroni no tuvo miedo, por que había alcanzado un gran
poder y su altura era mayor a la de dos elfos, era enorme con una piel gris
como la ceniza y estaba cubierto de negro acero y portaba un hacha que forjo en
negros caldero y enfrió con la sangre de sus hermanos.
Así Mordin lucho contra Kroni , el adversario de la
raza enana, fue una lucha feroz por el destino del pueblo de Mordin y por la
venganza de aquellos que habían caído. La feroz batalla se prolongo por horas
hasta que Mordin logro imponerse y derroto a Kroni, arrancándole el ojo
izquierdo. Así Kroni escapo del combate, tuerto y dolorido, por que otra vez
fue derrotado por su hermano.
Mordin no persiguió a su loco hermano, sino que
decidió primero dar sepultura a sus hermanos caídos. Tras sepultarlos y
llorarlos llamo a su padre Dagda, quien adolorido se presento ante su hijo
quien le pidió que vengara a sus hermanos, que castigara a Kroni. Pero Dagda
le dijo que Grumrar fue un Patriarca alguna vez, y estaba protegido por un
pacto de Dagda al se su hijo, solo si Grumrar alzaba su mano en contra de
Dagda, el dios podría golpear al patriarca caído. Fue así que Mordin juro que
el no descansaría hasta que matara a Kroni, y esta promesa hirió a Kroni más
de lo que podría herirlo una espada y lo lleno de miedo y odio.
Pero la
vileza de Kroni no
termino allí, se refugio en el más remoto norte, donde Ahriman le creo un
pequeño continente para que reinara, al mismo tiempo que le doto de nuevo poder
divino para que pudiera dar a luz a nuevos hijos, pero a cambio Grumrar prometió
que jamás podría alzar su mano en contra del dios de la guerra y sus nuevos
hijos sembrarían caos y destrucción por toda Arcadia. Así Kroni quedo
atado a las cadenas del odio y la guerra del todo, y creo una torre de hierro
en su nuevo reino y vertió su sangre en la roca y el acero, pero sus hijos
salieron deformes, al igual que su padre y así nacieron los Orcos.
Con los años
los ejércitos de Kroni atacaron
muchas razas de Arcadia, pero se esforzaron por destruir a los Enanos. Sin
embargo no lograron eliminar a los hijos de Moradin, y estos juraron que
destruirían hasta el último de sus hermanos corruptos e incluso los Deagars
juraron que no descansarían hasta que el último Orco muriera. Sin embargo Mordin
tras varios milenios se marcho de Arcadia y dejo su hacha a un hijo digno de
ella, y vivió junto a su padre y maestro hasta nuestros días. Sin embargo
Durante la guerra de los Dioses Ahriman reconoció su implicación en los
siniestros hechos aquí narrados y se rió de ello ante Mordin quien no perdono
al dios de la guerra por el daño hecho a el y a sus hermanos.